Murga - Der Film



Februar 2003 in Montevideo: Der Sommer geht im Süden zu Ende, die Zeit der Murga beginnt. Satirisches und Politisches erfüllen die Tablados,  die Bühnen der Stadt. Die Murgas ziehen von Stadtviertel zu Stadtviertel und stimmen in den Barrios ihren poetischen Abgesang auf den Zeitgeist ein. Zeit der Bilanzierung und des Neubeginns. Die Murga verfolgt die soziopolitische Realität der uruguayischen Gesellschaft minutiös und steuert eine farbenprächtige, melodische und messerscharfe Analyse bei. Die Murga kommt und geht ... und versucht sich als Katalyse und Katharsis, als Vehikel für den Neubeginn und Fürsprecher für den zerfallenden Traum eines Landes, Uruguays - einst die amerikanische Schweiz genannt, heute eher als "el Paisito" belächelt, das Ländchen ...

Noche de murga dokumentiert diese herausragende Manifestation des Karnevals in Uruguay, begleitet die traditionsreichen Los Diablos Verdes und versucht die Magie der Murga einzufangen. Antonio Iglesias*, inzwischen leider verstorben, gründete 1939 diese legendäare Gruppierung und war noch 2003 ihr Direktor. Bereits Ende Oktober des Vorjahres beginnen die Proben, die Texte werden überarbeitet, die Arrangements optimiert. All dies für diese wenige Wochen im Spätsommer. Die Chronologie des Films diktiert der Hauptdarsteller: Entrada, das Auflaufen der Murga - die Anspannung ist enorm. Cuplé, der Auftritt. Zum Ende des Karnevals hin wird die beste Murga prämiert, aber der wahre Preis ist das Tablado,  Abend für Abend. Der Beifall, die wichtigste Meßlatte. Denn die Murga ist die laut hörbare Stimme des Volkes und sie wirkt nachhaltig. Salida, der Abgang. Mystische Stille. Ein Trauerschleier ummantelt das Tablado. Ein Jahr wird vergehen, ein Jahr mit Höhepunkten und Niederlagen, Stoff aus welchen die Murga die nächsten Kapitel ihrer Chroniken verfassen wird.

Noche de murga


Febrero 2003 en Montevideo: En el sur el verano llega a su fin, la murga ocupa su lugar en la  escena. Es el momento del balance y la renovación. Lo político y lo satírico invaden los tablados, los escenarios desmontables de la ciudad. Las murgas se desplazan de barrio en barrio entonando su poética melodía final al espíritu del tiempo. Persiguen minuciosamente la realidad sociopolítica  de la sociedad uruguaya y contribuyen con un análisis multicolor, melodioso, agudo. La murga viene y va... se propone como catalizador y catarsis, vehículo de un nuevo comienzo y mediadora de los sueños rotos de un país, Uruguay - en el pasado, llamado la "Suiza de América", hoy, en cambio, peyorativamente "paisito"-.

Murga - El documental registra esta impresionante manifestación del carnaval en el Uruguay, intentando capturar su riqueza y su magia. Acompaña el recorrido del grupo tradicional Los Diablos Verdes, fundado 1935 por Antonio Iglesias, entretanto lamentablemente fallecido, pero quien en 2003 era su director. Las pruebas, la revisión de los textos y la optimización de los arreglos se inicia en octubre del año anterior. Todo, para estas pocas semanas de espectáculo callejero sobre el final del verano. La cronología del documental la imponen sus protagonistas.

Entrada, la congregación de la murga - la tensión es enorme. Cuplé, la salida a escena. Hacia fines del carnaval es premiado el mejor de los grupos, aunque el verdadero premio tiene lugar noche tras noche en el tablado: la ovación de la gente. Pues la murga es la voz audible del pueblo, que surge de manera persistente, fuerte, poderosa. Salida, la murga abandona los escenarios de la ciudad. Silencio místico. Un velo de luto cubre el tablado. Y habrá de transcurrir un año, otro año de derrotas y triunfos, la materia de la cual la murga escribirá el próximo capítulo de sus crónicas. Chau, murga...

La película se estrenó en junio de 2003 en Berlín con la presencia de Ernesto Kroch, entre otros invitados.  

Traducción: Natalia Vidal

* Mehrere Akteure in Noche de murga sind inzwischen verstorben. Nicht nur mein Vater, Manuel Méndez Lombardia, sondern auch zwei Größen des uruguayischen Karnevals wie Antonio Iglesias und Servando Ruíz, "El Boyero", langjähriger Moderator des uruguayischen Karnevals. Ruíz stand über 60 Jahre auf den Brettern die im Spätsommer Montevideos mehr als die Welt bedeuten. Es war ein Glück im Jahr 2003 all diese besonderen Menschen erleben zu dürfen.